Por la 8va fecha de la Superliga, Boca derrotó a Defensa por 1 a 0 con gol de Almendra. Los de Alfaro tenían que recuperarse tras el duro traspié en la ida de las semifinales de la Copa Libertadores y mantener la punta del torneo.
En frente tenía a uno de los rivales más duros que tiene nuestro fútbol, el cual combinaba juventud y una idea ofensiva que suponía una buena prueba para el Xeneize a la hora de probar nombres de cara a la vuelta ante River.
El cambio de nombres en la previa vaticinaba el partido que se dió: Una presión alta del Xeneize para buscar incomodar a los dirigidos por Mariano Soso. Eso lograba a los 25 minutos de la primera parte: Jan Hurtado molestó, desviando la dirección de la pelota en la salida del rival, Alexis Mac Allister tocó para Mauro Zárate, quien no pudo definir, pero la pelea en la puerta del área llevó la pelota a donde estaba Agustín Almendra, quien ingresó a la zona de peligro para definir con su pierna inhábil de gran manera y convertir, pese a la respuesta de Luis Unsain.
Gran definición de #Almendra para poner arriba en el marcador al Xeneize en Florencio Varela #juegaBoca pic.twitter.com/cTCr986J2o
— La Número 12 (@lanumero12comar) October 6, 2019
La más clara luego de abrir el marcador la tuvo Zárate, de tiro libre, aunque la pelota se terminó yendo desviada.
El complemento trajo otro encuentro, Boca terminó aguantando más de lo que propuso en el arranque. Defensa complicó y de no ser por la gran labor de Lisandro López -quien sacó una en la línea- y de Carlos Izquierdoz -otra vez 'patrón' de la defensa-, se hubiera llevado un susto.
Con los ingresos de Carlos Tevez y Emanuel Reynoso por Zárate y Mac Allister, Alfaro buscó renovar aire, aunque el Xeneize terminó desordenado, lo que derivó en l ingreso de Campuzano por Almendra con el objetivo de sumar un poco más de recuperación en el mediocampo.
Boca presentó una serie de errores que dejaría a muchos preocupados. 'Licha' López se calzó el traje que suele ponerse Esteban Andrada y sostuvo el cero en el arco con propicias intervenciones. De manera anecdótica, pero no por eso menos preocupante, quedará la roja de Julio Buffarini por doble amonestación.
No fue una actuación de las que dejen conformes, porque lejos estuvo de serla. Pese a refugiarse ante un rival de mucha menos jerarquía, conseguir tres puntos fuera de casa en este momento emocional que atraviesa el grupo quizás deje buenas sensaciones. Pero lo que no debe quedar es un conformismo con la idea de juego, el camino por mejorar seguirá siendo largo pensando en el 22 de octubre, donde buscará una nueva hazaña ante el rival de toda la vida.