La realidad de los jugadores surgidos en el semillero de Boca no es la mejor. Mientras Arruabarrena espera por los refuerzos, los pibes del club siguen emigrando para buscar continuidad. En este caso se trata de Manuel Vicentini y Dino Castagno que se fueron a Guillermo Brown de Puerto Madryn, mientras que Nahuel Zárate se fue a préstamo a Godoy Cruz de Mendoza.
Zárate dejó el jueves la concentración de Boca Juniors en Tandil para sumarse a Godoy Cruz.
El hace tiempo que había dejado la titularidad en Boca y quedó relegado por Nicolás Colazo y Emanuel Insúa, al tiempo que el entrenador Rodolfo Arruabarrena busca otro jugador en el puesto.
Mientras que Vicentini y Castagno, también decidieron buscar continuidad y ese lugar lo encontraron en el Nacional B donde defenderán los colores de Guillermo Brown.
Vicentini (24 años) jugó su único partido en la Primera de Boca allá por el año 2012. En la gira realizada en Colombia y Venezuela, Agustín Orion estaba lesionado y el titular era Sebastián D'Angelo, mientras Vicentini se sentó en el banco. Horas antes del partido con Independiente de Santa Fe, D'Angelo se lesionó, siendo Manuel Vicente ni en que ocupó ese lugar.
Castagno por su parte (21 años) llegó a Primera gracias a Carlos Bianchi. Su posición natural es de 2, un marcador central con mucha potencia, lo catalogaron sus compañeros. De la mano del Virrey jugó algunos amistosos en el verano de 2014 y fue titular en el torneo ante Gimnasia en la última fecha del torneo Final.
Tres nombres que se van. Historia repetida con los juveniles que nunca llegan a afianzarse en Primera.