Gustavo Alfaro sacó pecho tras dejar atrás el traspié el Brasil con el triunfo de Boca por 4 a 0 ante Jorge Wilstermann en La Bombonera.
Boca superó a Jorge Wilstermann por 4 a 0 y dejó atrás el traspié sufrido en Brasil cuando cayó por 3 a 0 ante Athletico Paraense. En La Bombonera, el equipo de Gustavo Alfaro fue de menor a mayor y supo lastimar cuando debía.
El entrenador analizó el complicado arranque del Xeneize, que tuvo la lluvia jugandole en contra y provocando cambios sobre la marcha en el planteo:
“En el primer tiempo no encontrábamos los espacios. Teníamos la pelota pero no hacíamos daño. Buscabamos hacer llegar la pelota con conducción a Carlos (Tevez) y a 'Bebelo' (Reynoso). La ansiedad y el cambio de clima nos jugó en contra. Empezó a llover muy fuerte y el campo de juego se puso pesado, también jugamos con el viento en contra todo el primer tiempo”
Además, remarcó la importancia del encuentro tras el traspié en Brasil:
“Era un partido trascendente para nosotros. Volvíamos a jugar de local luego de una derrota que nos dolió mucho en Brasil, necesitábamos volver al triunfo”
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Además, agregó:
“Cuando tenes una derrota dolorosa lo que queres es una revancha. Yo no cambie a nadie del partido de Paranaense a este porque era culpabilizar a alguien de la derrota. Se merecían una reivindicación”
Finalizando, dejó un fuerte mensaje ¿Habrá sido para cierto sector?:
“Yo tengo mi perfil y mi forma de entender las cosas. Soy obsesivo y quiero ganar siempre. No me conformo con la mediocridad. Soy un tipo que nunca se da por vencido y voy a luchar por todas las cosas que vine a conquistar a Boca”
