Boca goleo a River en Mendoza 5 a 0, el Xeneize fue superior y con goles de Franco Cristaldo, Sebastian Palacios, Andrés Chávez , Jonathan Calleri y Rodrigo Bentancur le dio una paliza histórica al máximo rival.
Ni el mejor pronosticador hubiera imaginado esto, más por como arrancó el encuentro, Boca un poco tímido y un River totalmente distinto al de Mar del Plata, parecía que esta vez iba a atacar y en todo caso lo intento. Boca había presionado y un remate débil de Jose Pedro Fuenzalida era lo único de peligro que había demostrado el Xeneize. Así fue como el peligro de Leonel Vangioni se hizo notar, entrándole duro al Tucu Palacios y recibiendo la primera amarilla del partido a los 9'. Todo esto hasta los 14', donde empezaba lo que fue la noche soñada para todos los que eran azul y oro: El Millonario dormía en defensa y Cristaldo se fue solo, de atrás lo seguían pero jamas lo pudieron alcanzar y con un fierrazo de zurda, ya adentro del área, colocaba ante el palo derecho de Marcelo Barovero el primero de una noche que va a quedar marcada en la retira de cualquier fanático del Club de La Ribera. Boca empezó a dominar, con algunos remates de lejos de Jonathan Maidana y Ramiro Funes Mori que hicieron que Sara se luciera quiso responder los dirigidos por Marcelo Gallardo, pero a los 21' se estiraba la ventaja: Chávez le cruza una pelota barbara a Palacios y el tucumano, como un wing derecho de la vieja escuela, define ante la salida del arquero millonario con mucha clase y pone el 2 a 0 para todo el deleite Xeneize. Los dirigidos por Rodolfo Arruabarrena ponían la música y el rival se movía al ritmo que manejaba por sobre todos Fernando Gago, fundamental en la recuperación y distribución de la pelota. Por eso y por la presión, a los 30' se decretaba goleada, parcial pero goleada: Devolución de favores, Palacios se la cruzo entre lineas al Comandante, que escapo y con zurdazo despacio pero con calidad, dejaba en el camino a Barovero y nuevamente se ubicaba sobre el palo derecho del portero y ponía la ventaja por 3 a 0. River fue todo lo malo que se puede ser un partido, derrotado, nervioso, abatido y molesto, lo llevo a una expulsión de Camilo Mayada, ya estaba amonestado, pero su entrada fue para Diego Abal de roja directa. Sin más emociones, cuidándose del temperamento y nerviosismo del rival, así se iba un primer tiempo soñado para Boca y sus fanáticos en Mendoza.
El complemento empezó tranquilo, demasiado tranquilo, un remate de Leonardo Pisculichi a los 46' ponía en alerta a Boca, mientras que River, con 3 variantes buscaba achicar y tratar de no recibir más castigo. Carlos Sanchez había ingresado por Leonel Vangioni para cubrir el lado que dejo vacante Mayada por su expulsión, pero en un segundo tiempo donde el Xeneize movía la pelota, el uruguayo se fue de boca y el arbitro no lo paso por alto, el Millonario se quedaba con 9 y la paliza se agrandaba más. Sin apurarse, dominando la pelota y con un Gago implacable, el juego de Boca se hacía sentir. River estaba destruido, sin ideas y nervioso. Se dejo llevar por el buen juego de Pintita, quien levantaba a la gente y fue Teofilo Gutierrez quien no aguanto y a los 73' vio su segunda amarilla (la primera fue a los 40' de la parte inicial) y dejaba con 8 jugadores a un River desbastado. En Boca se producían los ingresos de Bentancur, Vadalá y Calleri por los autores de los primeros tres goles. Así de encendidos entraron y primero fue Calleri, quien ponía el cuarto 81' y tres minutos más tarde le ponía un centro impecable a Bentancur, quien anotó el quinto y fulminaba la historia.
Para la anécdota quedaran los goles perdidos, que pudieron ampliar la ventaja. Lo que no se borrara nunca es la paliza, el baile y el compás de Boca, que jugando así ilusiona a todos de cara a la Copa Libertadores.