Boca cayó ante Athletico Paranaense por 3 a 0 en Brasil. El Xeneize no hizo pie y tuvo rendimientos individuales muy flojos.
En tierras brasileñas, Boca no se hizo fuerte como acostumbra su historia y cayó goleado ante Athletico Paranaense por 3 a 0 en el Arena da Baixada. Flojos rendimientos en la mayoría de los nombres elegidos por Gustavo Alfaro, quien no pudo encontrarle la vuelta al partido con los cambios realizados.
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Esteban Andrada (4): Venía bien, salvando lo que podía ser una goleada pero cometió el grave error: Salió a bloquear un remate cuando el rebote en el travesaño ya estaba llegando a la cabeza de Ruben para el 3 a 0.
Julio Buffarini (3): Va a soñar con Roni. El lateral tuvo una noche para el olvido y no pudo parar nunca al extremo del conjunto local. Muy flojo.
Lisandro López (5): Un blooper en el error colectivo más grande de la noche lo hizo dar vueltas por todas las redes sociales. En cuanto al juego, por arriba estuvo intratable, no tuvo grandes responsabilidades en los goles.
Carlos Izquierdoz (3): Se salvó de ser expulsado en el final. Flojo en líneas generales. Preocupa de cara al futuro.
Emmanuel Mas (4): No pesó en ataque. Jamás fue una alternativa para Reynoso. Fue el que menos sufrió en su banda.
Sebastián Villa (5): El más regular. Metió un centro precioso que Benedetto falló inentendiblemente. No se entendió por qué salió.
Nahitan Nandez (3): Perdido. Partió el medio del equipo ubicándose en todos los lugares en los que sobraba.
Iván Marcone (3): No se sintió cómodo al lado de Nandez. Le costó la entrega, desde la más fácil hasta la más difícil, no le salió ninguna.
Emanuel Reynoso (4): Parado como interior izquierdo para defender, se corría al medio para atacar. Flojo con la pelota, no gravitó nunca.
Carlos Tevez (4): De mayor a nada. Carlitos no impuso su categoría en ningún momento. Arrancó eléctrico y luego se desvaneció.
Darío Benedetto (2): El peor partido de Pipa desde su llegada. No le salió nada. Ni en lo colectivo ni en lo individual. El primer gol de Paranaense llega por un cambio de frente horrible. Lejos de ser el Benedetto que nos tiene acostumbrados.