Boca superó a Argentinos Juniors en La Paternal por 3 a 1 en un encuentro caldeado. Carlos Tevez por duplicado y Jonathan Calleri sobre el final, pusieron los tantos Xeneizes. Ezequiel Ham descontó para el local, aunque en un choque con el Apache sufrió una fractura para pena de todos. Reinaldo Lenis fue expulsado en El Bicho.
Boca tenía un compromiso en La Paternal, en un estadio con dimensiones chicas que iban a complicar el traslado y el juego del equipo dirige Rodolfo Arruabarrena. En arranqué, en si, fue como la mayoría del encuentro: Boca intentando y Argentinos respondiendo, pero ambos con muy poca claridad en el manejo de la pelota. Si bien era el Xeneize el que quería proponer juego, la poca claridad de conexión entre medio, delanteros y laterales hizo muy pobre la parte futbolistica, solo un centro de Carlos Tevez a Sebastian Palacios que llegó a rechazar la defensa del Bicho y un remate desviado de Andrés Franzoia fueron lo más destacable hasta los 40' del inicial. Lo que si tuvo el encuentro, fue constantes discusiones y mucha demencia generalizada. Tal fue así que en esos momentos los genios sacan a relucir su mejor performance: Moría la primera parte, El Apache la maneja en la puerta del área y saca un fierrazo infernal que se iba a meter en el arco de Adrian Gabbarini. Locura generalizada del plantel y cuerpo técnico.
Cuando cerraba el telón del primer acto, Reinaldo Lenis se dejo llevar y con un acto de cobardía, golpeo a Nicolas Lodeiro. Los referentes separaron lo que pudo ser una batalla campal con un clima que cada vez se ponía más pesado. Para suerte de todos, el arbitro (Que no tuvo una actuación muy fina) finalizo los primeros 45.
El complemento tuvo demoras en su inicio, ya que cuando Lenis se enteró de su expulsión fue a buscar al Uruguayo pero sus compañeros lo detuvieron a tiempo. Rápidamente, a los 8', nuevamente Carlos Tevez puso desde su botín, tras un gran pase, el 2 a 0 y el Xeneize se afirmaba en el terreno de juego.
Tan solo un minuto de distracción, le costo al equipo el descuento y la presión del Bicho fue tal que Ezequiel Ham encontró el descuento tras dormir a la defensa y estampar con la cabeza su remate. Luego, el desarrolló fue más de raspe y juego brusco que de tenencia del balón, tal fue así que los autores de los goles disputaron la pelota y, para la mala suerte de ambos, el mediocampista del local se llevó una fractura en el tobillo. Tras ese suceso, las cosas se serenaron y se intento jugar al fútbol, cosa que ninguno hizo pie en todo el encuentro. Ya en el cierre, al Xeneize le alcanzó para agrandar la diferencia: Pelota rechazada desde la defensa visitante, mal dominio de los centrales del local que Jonathan Calleri, de partido discreto, aprovecho para sellar con una buena definición el 3 a 1 final.
Así, Boca reafirma su situación de puntero en un encuentro que fue más áspero que lírico.
