Gustavo Alfaro analizó el empate en cero y todo el contexto que dejó la visita de Boca a Vélez por la ida de los cuartos de final de la Copa de la Superliga.
Boca se trajo un empate de su visita al barrio de Liniers. El DT, Gustavo Alfaro, analizó no sólo lo ocurrido en los 90 minutos, sino también todo el contexto que se generó en torno al regreso de Mauro Zárate al Amalfitani.
Finalizado el cotejo, respecto a los insultos que recibió Mauro, incluso durante la entonación del himno nacional argentino, opinó:
«Entiendo las pasiones y los sentimientos encontrados, pero el himno es algo diferente en todas partes del mundo. Yo lo expreso cantando, jamás insultaría, ni a mi propio enemigo, en el medio de un símbolo nacional tan importante».
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Además, reveló la charla previa al partido que tuvo con el ex Inter y Lazio, donde decidió finalmente incluirlo entre los 11 titulares, luego de muchas especulaciones sobre la presencia o no de Mauro:
«Hablé muchas cosas con Zárate, no solamente de este contexto. Le dije que no iba a hacer nada que lo perjudique a él ni a Boca. Cualquier decisión que tomara iba a ser controvertida, si lo pongo es porque no lo protegía, y si no lo ponía ¿Qué iba a decir la gente de Boca? ¿Yo quiero ganar el partido y no pongo a uno de los mejores jugadores que tenemos?. Le dije que la decisión la tomara el, que yo iba a hacer lo que él quiera, me dijo que quiere jugar todos los partidos, que vino a Boca a triunfar, así que le dije que se centre en el partido, que trate de aislarse para estar enfocado. Más allá de que es fácil decirlo, hay que estar en la piel de él para soportar esas cosas».
El ex DT de Arsenal planteó un equipo replegado, más combativo, cuidando los espacios que suele generarse el equipo del «Gringo» Heinze. Al ser consultado por ésta estrategia, argumentó:
«El primer partido era más para pelearlo, Vélez estaba mas descansado que nosotros. Nos faltaban los jugadores que manejan la pelota, para romper la presión de la mitad de la cancha. Ellos nos iban a jugar al desgaste. Los chicos le pusieron el alma».
Analizó tácticamente lo transcurrido durante el juego:
«Fuimos interpretando el partido, en el primer tiempo sacamos a Nandez a presionar a los volantes de ellos. En el segundo tiempo tiraron a Domínguez como volante por derecha, parando una linea de 3 volantes, por eso pusimos a Nahitan como volante por adentro. Nos faltó sacar la pelota para romper la primera presión y poder contragolpear, eso le faltó a Boca, lo demás lo hizo bien».
Una de las características del «Fortín» es la cantidad de jugadas de gol que se genera por partido, por ello, Gustavo remarcó la importancia del bloque defensivo xeneize y las pocas llegadas del local:
«En el primer tiempo, la única llegada de Vélez vino de un rechazo de una pelota parada. Después, si bien apretó sobre el final, nunca vi que Almada, Vargas, Bouzat o Fernandez puedan imponer su capacidad, Boca siempre estuvo bien parado en defensa».
De cara a la revancha, que se jugará el próximo jueves, en la Bombonera, Alfaro dijo:
«Le dije a los jugadores en el vestuario que lo único que tienen que hacer es descansar, para recuperarnos de la mejor manera posible. El partido que se viene va a ser tan intenso como este, se va a definir en los detalles, será otro partido de ajedrez. Queríamos dejar la serie abierta, y en eso está. El empate no quiere decir nada, no nos saca ni nos da nada. Hay que analizar el partido, ver como están los jugadores, qué tenemos para armar y con eso intentar seguir adelante cumpliendo objetivos».
