Un día como hoy, pero de 1968, acontecía en el país lo que sería la mayor tragedia en un estadio de fútbol nunca antes vista: 71 hinchas xeneizes resultarían muertos.
Boca y River protagonizaban un clásico más en su rica historia. El 23 de junio de 1968 y por el Torneo Metropolitano, terminarían empatados 0 a 0. Pero las noticias no tardaron en llegar. Finalizado el cotejo, una avalancha se produjo en la puerta número 12 del estadio (actual sector L de la tribuna alta Centenario) , producto de la gran cantidad de hinchas concentrados esperando por su salida.
Pasaron 47 años y el hecho aún no se ha esclarecido. Misteriosamente, se desconocen las verdaderas causas de la tragedia, aunque se dieron a conocer tres teorías que habrían generado el accidente: La primera indicó que las puertas del estadio permanecieron cerradas y los molinetes del mismo aún se encontraban en el lugar. La segunda, denuncia a los policías, quiénes estaban bajo el mandato de la dictadura de Onganía, de una posible brutal represión hacia los hinchas. La tercera, acusa a la barrabrava de Boca, quienes en su apuro por evitar ser detenidos por la policía, habrían ingresado de nuevo al estadio y generado el desastre.
Poco tiempo después, los peritos confirmaron la primer teoría, por lo que el juez ordenó la prisión preventiva de Américo Di Vietro y Marcelino Cabrera, intendente y capataz de River, como así también, un embargo de 200 millones contra ambos y contra el club. Inesperadamente, a fines de noviembre, ambos quedarían absueltos de su condena y el caso quedaría en la nada misma.
Hasta el día de hoy, se desconoce la verdadera causa del desastre y los culpables de la misma. Asímismo, desde los grandes medios de comunicación, se omite todo tipo de conocimiento alguno y homenaje alguno. Una tarde nefasta que jamás olvidarán los hinchas de Boca. Y que está en nosotros volverla a poner en la agenda y luchar por Justicia. Prohibido Olvidar…
