Analizamos el rendimiento, jugador por jugador, en el triunfo de Boca por 2 a 0 sobre Libertad en Paraguay. Mirá quién fue la figura del Xeneize.
Por la tercer fecha del grupo H de la Copa Libertadores 2020, Boca derrotó a Libertad en Paraguay por 2 a 0. Eduardo Salvio, autor de los dos tantos del Xeneize y figura del encuentro.
Lee también: El Guerrero Z de La Boca: Salvio, la llave del triunfo
Esteban Andrada (6): No se notó la inactividad ni la reciente recuperación tras formar parte de los infectados por COVID-19. Firme por arriba y nunca se complicó con los pies.
Leonardo Jara (6): Mejor en la marca zonal, algo flojo en el mano a mano con Villalba. El ex Estudiantes tuvo que suplir a Buffarini y tuvo una salvada heroica tras un pifie de Izquierdoz cuando el partido iba 1 a 0 a favor del equipo.
Carlos Zambrano (6): Junto con Izquierdoz, le pusieron llave al área Xeneize. Cardozo no pudo superarlos nunca. Gran nivel del peruano, que buscará luchar con López el lugar en la saga central.
Carlos Izquierdoz (7): Se convirtió en la pesadilla de Cardozo, la figura de renombre de Libertad, tanto que la única forma en la que participó el delantero paraguayo, fue cuando se hizo cargo de la pelota parada. Tuvo un error que terminó salvando Jara en el área chica.
Emmanuel Mas (6): El único duelo que perdió con claridad, no llevó demasiado peligro. Ayudó a controlar el juego aéreo y mostró una proyección que le debía al equipo previo al parate. Siendo el más apuntado en cuanto a rendimiento, terminó demostrando un buen nivel.
Eduardo Salvio (9): El goleador de Boca en la Copa Libertadores no defraudo. El arquero le negó el gol, el rebote de Maroni pegó en el palo y a la tercera, no perdonó. No sólo ayudó a Jara en la marca, también demostró su clase con un caño con pisada que demuestra su clase. Tras un gran pase de Cardona, enganchó y definió de zurda para cerrar el partido. La figura de la noche en la que el Xeneize volvió al ruedo.
Jorman Campuzano (7): Soberbia sociedad con Fernández. El colombiano sigue demostrando que es un reloj suizo, tras seis meses de parate demuestra su regularidad. Si bien no es muy nombrado por los relatores, cumple con su trabajo silencioso. Terminó viendo la amarilla por llegar tarde a un cruce, su único error.
Guillermo Fernández (6): Complementa bien a Campuzano, cubriendo las zonas que el colombiano no puede y siendo el que se encarga de recibir. Trabajó muy bien en la recuperación, aunque le faltó destacar en la ofensiva.
Gonzalo Maroni (5): Le tocó cubrir la izquierda, una posición que no es natural. Se mostró apurado en la salida, quizás por la presión de buscar ganarse el puesto, y cometió errores. Falló dos claras que pudieron haber llevado calma mucho antes a que Boca cierre el partido.
Carlos Tevez (6): El capitán volvió bien como el resto del equipo, forzó a lucirse al arquero rival en dos oportunidades y retrocedió de manera prolija. Se le notó la falta de rodaje, pero no pierde la calidad. Inoxidable a sus 36 años.
Franco Soldano (6): Le falta encontrar su lugar en el área, pero Soldano hace el trabajo sucio que Tevez, por cuestiones de edad y desgaste, no puede. Se mueve por todo el frente, colabora en la recuperación y se muestra como opción cuando la defensa rival se cierra. Un obrero que juega de punta.
Nicolás Capaldo (6): Aportó frescura cuando Boca no tenía la pelota. No sólo se encargó de ordenar al equipo, también mostró proyección por la izquierda, un sector que no es natural para él. Cumplidor.
Edwin Cardona (7): El rato que estuvo en cancha le alcanzó para demostrar su clase. Si bien al principio buscó su lugar, terminó mostrando su clase con una asistencia magistral para Salvio, que convirtió el segundo. En el cierre, acompañó la contra, desparramó dos rivales por el suelo pero su remate terminó siendo atajado por el arquero.
Walter Bou (6): Entró con ganas en el inicio de su segundo ciclo en Boca. Gran visión para habilitar a Salvio, que no remató bien y terminó con la intervención del arquero rival.
Iván Marcone y Frank Fabra (-): Poco tiempo en cancha para ser evaluados, pero se mostraron participativos cuando Boca dominaba.