Por la decimoquinta fecha de la Liga Profesional de Fútbol, Boca superó a Lanús por 4 a 2 en La Bombonera, que contó con el regreso de su público tras casi 600 días sin poder asistir al mismo. El conjunto de Sebastián Battaglia debía recuperarse de la durísima derrota ante River en el Monumental en la fecha anterior y que mejor oportunidad que hacerlo ante sus hinchas.
Es cierto que el Granate golpeó primero al Xeneize, con un centro que Ignacio Malcorra definió con soberbia sin dejarle oportunidad a Agustín Rossi y ante la atónita mirada de la defensa, que no advirtió su llegada al área. El local nunca aflojó con la intensidad, y encontró en una gran jugada colectiva, la igualdad: Agustín Almendra cambió de frente para un Edwin Cardona bien volcado a la banda derecha. El colombiano apuntó y encontró la cabeza de Marcelo Weigandt, que marcó la igualdad.
Antes del cierre de la primera parte, el mismo Almendra fue el encargado de poner justicia en el marcador. El volante encontró un hueco en el arco que defendía Lautaro Morales que se encargó de traducir en gol con un remate bajo. Así, Boca se iba al descanso con la ventaja en el resultado y en el juego, ya que era ampliamente superior a Lanús.
El complemento mantuvo la tendencia. Battaglia había hecho variantes obligadas, Nicolás Orsini y Edwin Cardona habían dejado sus lugares para Aaron Molinas y Luis Vázquez, por lo que la juventud era una tendencia en un equipo que enfrentaba también a otra plantilla bastante joven. Y fue por los surgidos de sus inferiores que terminó encontrando el gol que le aportaría calma.
Gran jugada colectiva, José Sand buscó rechazar pero le entregó la pelota al centrodelantero de 20 años, que desparramó con una maniobra a un defensor rival y culminó la jugada con una enorme definición de goleador. El Xeneize había llegado al tercero, pero sobre el cierre y por un poco de inefectividad, terminó sufriendo el descuento de Diego Braghieri.
En la agonía del encuentro, Weigandt utilizó su segundo aire para filtrarse en el área rival, donde lo desestabilizaron. Claro penal sancionado por Pablo Echavarría, que Cristián Pavón se encargó de cambiar por gol con un remate en la dirección contraria a la que Morales se tiró. Así, cerró un enorme triunfo para traer la calma posterior a la derrota en el superclásico.
Aún lejos de River en la tabla de posiciones, Boca se encontró en la otra tabla a dos unidades de Estudiantes de La Plata, el último en ingresar de manera directa a la Copa Libertadores de América 2022. El objetivo, de momento, será ese. Un tropezón del rival de toda la vida podría cambiar el panorama, pero para eso hay que mantener la tendencia del triunfo.