Soldano no pudo ocultar su felicidad por seguir en Boca. El delantero habló en detalle sobre su continuidad y reveló el acuerdo entre Boca y Olympiacos.
Finalmente, una de las novelas del mercado tuvo final feliz: Franco Soldano continuará en Boca, ya que el Xeneize pudo acordar una extensión del préstamo con el Olympiacos, club dueño del pase del delantero, por 12 meses.
Lee también: “Tengo que ser fuerte, potenciarme para volver de la mejor manera”
El arreglo fue por 300 mil dólares (250 mil ahora, y una segunda cuota que deberá abonarse más adelante), aunque más allá de lo económico, la clave del éxito de la negociación pasó por la decisión del jugador, quién a base de sacrificio, se ganó un lugar en el equipo predilecto de Miguel Ángel Russo.
En diálogo con Fox Sports Radio, Soldano dio detalles de la operación y expresó su alegría por continuar en el Xeneize:
"Hay acuerdo entre las partes. En estos días, si Dios quiere, me sumo a los entrenamientos. S que es un préstamo. Para agilizar todo hoy ya me confirmaron. Estoy llegando a Buenos Aires para sumarme lo antes posible y reducir los tiempos. Yo quería seguir en Boca. Apenas terminó mi vínculo fue lo que les manifesté a mi representante y al consejo de fútbol. Hubo un gran trabajo y se llegó a un acuerdo. Se consiguió un préstamo más barato".
Reveló como vivió todo este tiempo donde parecía que las negociaciones no llegarían a buen puerto:
"Había una incertidumbre, cuando no había fecha de los entrenamientos se hacía más llevadero. Cuando empezó la práctica me picó el bichito de querer sumarme, porque se pierde a nivel personal. Ahora quiero reincorporarme lo más rápido posible".
Párrafo aparte para con el interés que tuvo Boca por Silvio Romero. Para Soldano, no fue motivo de preocupación, sino de orgullo:
"Me generó orgullo que Boca negociara por (Silvio) Romero. Fue el goleador del campeonato y yo estaba en la pelea. Eso significa que yo algo bien hice. Hay un poquito de orgullo y uno sabe que estuvo a la altura".
A modo de cierre, analizó su presente y realizó una autocrítica sobre su juego:
"Sé que debo llegar más al gol. Conmigo el equipo marcaba goles, dos, tres o cuatro, por eso no me pareció un déficit. Si mi tarea contribuía, bienvenido sea".