El empate de Boca ante Central dejó un clima caldeado. Se jugó muy poco en Rosario, mucha queja y escaso fútbol. Las increíbles estadísticas.
Boca y Central igualaron 2-2 en un encuentro donde el principal protagonista no fue el fútbol, ya que hubo poco juego, demasiada fricción y pausas: se jugó muy poco en Rosario y las quejas de parte de los locales no cesaron.
Y es que los de la academia rosarina terminaron ofuscados por el arbitraje de Ariel Penel, quién a instancias del VAR anuló un penal (correctamente) de Luis Advíncula, cuando promediaban los 5 minutos del complemento.
Además, el juez expulsó a Miguel Ángel Russo como así también a Jorge Almirón, entrenadores de ambos clubes. No obstante y en líneas generales, el arbitraje fue flojo: Penel fue permisivo y los jugadores le terminaron manejando el partido.
En esta sintonía y según las estadísticas que arrojó el encuentro, sólo disputaron 44 minutos y 17 segundos de tiempo neto de juego. Asimismo, en el complemento, donde más detenido estuvo el juego, sólo se jugaron 23 minutos de 56 totales.
Por otro lado, el juez sólo decidió dar 10 minutos de tiempo añadido, algo escaso para lo poco que se jugó en Rosario.
El equipo continúa en deuda con el juego, pero Almirón y compañía pueden rescatar algo del empate ante: ante la adversidad, se repusieron en dos oportunidades en un estadio que, históricamente, le cuesta.