En el Polideportivo Jorge Camba, Boca cayó 1 a 0 ante Ferro por la final de la Copa Argentina y el título se le hizo esquivo una vez más.
En Avellaneda, con una multitud de gente como testigo y también con la presencia de la humedad, lo que impidió por momentos un juego normal, los de Hernán Basile no supieron torcer el partido ante un Verde que lo incomodó de principio a fin y se quedaron con las manos vacías en el encuentro decisivo del certamen federal, el cual se le sigue postergando ya que es una de las coronas que le faltan en el ambiente local. Pese a que los de La Ribera intentaron hasta el final, los de Caballito aguantaron y fueron justos campeones.
En un primer tiempo disputado y reñido, el que mejor lo supo jugar fue Ferro y por eso se llevó la diferencia en el resultado. Noé Pérez Leiva a los 10’ abrió el marcador tras una buena jugada individual y posterior definición que venció las manos de Lucas Farach. Por su parte Boca, que fue de menos a más y en la mayor parte del juego no pudo quebrar el planteó que dispusieron los de Caballito, no causó mayores peligros.
Ya en el complemento, el Xeneize tuvo la pelota pero, si bien contó con ocasiones claras para empatar cuando ya jugaba con arquero jugador, no pudo batir con eficacia la invulnerable defensa y a un arquero, Lionel Chillemi, que fue figura de un partido que finalmente se llevó Ferro por 1 a 0, lo que le permitió ser campeón en futsal por primera vez en su historia.
Tras la derrota, ahora Boca deberá jugar un partido final ante 17 de Agosto (campeón de la Copa de Oro) para definir la media plaza restante para poder disputar la Liga Nacional de Futsal a final de temporada.
Por otra parte, este sábado a partir de las 20 visitará a Villa La Ñata por la última fecha del Campeonato de Primera División.