Argentina derrotó a Marruecos en el segundo amistoso de esta gira. Andrada fue titular y fue sustituido. Marcone ingresó en el final.
En el Estadio de Tangér, Argentina derrotó a Marruecos por 1 a 0 en el segundo amistoso de esta Fecha FIFA. El equipo dirigido por el cuestionado Lionel Scaloni no solo tenía la obligación de ganar ante los ojos de los analistas de turno de la Selección, sino también de ofrecer algo agradable a los ojos teniendo en cuenta el paupérrimo nivel demostrado ante Venezuela.
Quizás se le haya escapado ese detalle al técnico, que lejos estuvo de plasmar una idea con los jugadores que puso en cancha. Es cierto que el viento era un factor que iba a jugar en contra, pero ciertamente pareció que nunca se trabajó en esta gira con lo visto en cancha. No hubo ideas, no hubo juego y las constantes infracciones de ambos lados se hicieron presentes. 29 en total en la primera parte.
Esteban Andrada, representante de Boca en el combinado nacional, intervino de manera correcta con el único remate a puerta y su notable juego de pies para hacer entregas efectivas saliendo desde el arco. Nada más para destacar, ni siquiera con figuras como Paulo Dybala o el ex Boca, Leandro Paredes.
El complemento fue más de lo mismo, pero evidenció cosas que deberá explicar el mismo Scaloni de cara a la Copa América. En un partido donde claramente cuesta imponer el juego, hizo un cambio de arquero por arquero: Salió Andrada e ingresó Juan Musso. Inentendible teniendo en cuenta que Marruecos nunca ofreció ser una amenaza más allá de los errores en la salida o las pésimas entregas que ofreció el conjunto argentino.
A los 83 minutos, una buena cortina de Matías Suárez, quien entregó para Ángel Correa, que por animarse a más encontró el tanto que marcó la diferencia en el marcador.
Iván Marcone ingresó faltando 3 minutos para el final del encuentro. Quedará en el entrenador ver que pudo haber observado en cancha del hombre de Gustavo Alfaro, pero difícilmente pueda responder eso.
Nuevamente, Argentina deja un gusto amargo. Derrota ante Venezuela, victoria con gusto a nada frente a Marruecos. Más dudas que certezas y la sensación de que esta gira sirvió como casting para ver a quien le quedaba bien la camiseta nueva o a quien no. Habrá mucho para analizar desde afuera y poco desde adentro, ya que los ojos hoy están puestos en Scaloni, que día a día deja mucho que desear.